viernes, 13 de junio de 2014

LO QUE EL SIGLO SE LLEVÓ




Solamente quiero relatar los actos que durante este siglo, ya pasado,”según se mida”, han habido en nuestras fiestas y que por los motivos que fueren han dejado de existir;  sin entrar en el porqué de su desaparición. Este aspecto sería larguísimo y además subjetivo.

El primero de mayo de 1917, después del toque de Oración, desde la ermita de san Sebastián,- después ermita de san Antón y ahora paseo de “La Ermita”-, comenzaba el desfile de una fantástica “Cabalgata por las calles de la villa, precedida por una sección de aves acuáticas y gigantes y cabezudos”. Carrozas con las señoritas más distinguidas de la localidad, otra por el Rey Moro y su corte de honor. La última carroza era del personal de la Comisión organizadora quien la presidía, terminando en la plaza de Alfonso XIII,-actualmente de la Constitución- donde se efectuaba “la elevación de globos de figuras grotescas”. Los gigantes y cabezudos y la elevación de estos globos duraron hasta 1977.

Por la tarde del día dos, seguimos en 1917, después de las Solemnes Vísperas Litúrgicas en la iglesia, con la presencia de los Capitanes, se efectuaba un “simulacro árabe, corriendo la pólvora entre Moros y Cristianos”.

Las Solemnes Vísperas Litúrgicas se hicieron hasta finales de los años sesenta: aunque en los programas de las fiestas se ha reflejado hasta 1997.



Desde principio de la década de los cuarenta hasta 1964, por la tarde del día uno, desfilaban “Jinetes magníficamente ataviados acompañando a los Heraldos anunciadores de las Fiestas”.

El día dos, por la mañana, se trasladaban en procesión a Santa Ana y San Joaquín a la iglesia parroquial, para acompañar al día siguiente a la Santa Cruz en Romería a Mahoya;  a la vuelta se dejaban en su ermita. Esto se hizo hasta 1956.



Había una batalla entre Moros y Cristianos en Santa Ana y en Mahoya, el día 3 durante la Romería, en la que se conmemoraba la pérdida de la Cruz, al ser arrebatada por los Moros y posteriormente la reconquistada por los Cristianos. Esto desapareció a principios de los años cincuenta.

Se hacían carreras de cintas en bicicleta de forma continuada.

En 1967 se instauró el “Trofeo Tenerife” de ciclismo, del cual se celebraron XV ediciones en años consecutivos. Como anécdota cabe señalar que, en la primera edición, al campeón se le entregó un trofeo y 1.500 Pts., disminuyendo la cuantía hasta el 12º que recibió como premio 75 Pts. En la XII edición, el campeón ya recibía 7.000 Pts. y trofeo; recibiendo 5.000 Pts. el 15º. Este trofeo ciclista era puntuable para pruebas nacionales.

Desde finales de los cincuenta hasta mediados de los ochenta hubo competiciones de Tiro al Plato, intercaladas con Tiro al Pichón, y una vez a la Codorniz. Cinco de esas tiradas se denominaron “Trofeo José Vives”.

En el “Patio de Juana”- junto a la plaza Pintada-, en los años cincuenta,  se celebraron veladas de Lucha Libre. Ochando era la figura estelar.

Posteriormente, en la Plaza de Toros,-junto a Disco Púb. El Patio-, las veladas fueron de boxeo. Nuestro paisano Antonio Tenza nos deleitó dos años seguidos, 1968 y 1969. Hubo otra velada un año antes.

Como inicio de las fiestas, el día uno, se disparaba una monumental Mascletá. Esto fue del año 77 al 80 y otra en 1986.

                 En 1942, el equipo de fútbol “Imperio Frente de Juventudes” de Abanilla se enfrentó al Frente de Juventudes de Beniaján.

                 Los encuentros de fútbol en nuestras fiestas tuvieron continuidad hasta 1983. Los campos de fútbol de “El Palmeral”, “La Jaira” y el  “Bataláx” fueron sus escenarios, los cuales también han desaparecido. El Real Murcia, sus juveniles y el Imperial F.C. fueron los equipos que más nos visitaron.

                 En los años cuarenta, se hacían en el campo de deportes “El Palmeral” la Batalla de Flores. A continuación, las carrozas con su Reina, recorrían nuestras principales calles. Había carreras de sacos, cucañas y el juego del chocolate.

En 1968 se recuperaron las carrozas y la Reina de las Fiestas. Concha Rivera fue la primera y Josefina Martínez la última en 1985. Fueron 18 reinas y en algún año se eligió también Reina Infantil.

En 1945 Nicolás Rex nos dijo el Bando de la Huerta, en 1949 y 1967 volvió a hacerlo. En 1958 fue Emilio el de los Muebles. Posteriormente se le llamó Pregón.

Ángel Esteve lo hizo en cinco ocasiones, el primero en 1968 con la incorporación de las carrozas. Además de Pregón también se le denominó Sátira Humorística y Pregón Satírico, siendo en 1991 su última edición.
     
Tanto los bandos de la huerta como los pregones se efectuaban al aire libre.                

La Asociación de Moros y Cristianos “Santa Cruz” representó durante cuatro años una Embajada. Fue en la Plaza de la Constitución y en La Lonja (1985-1988).

                 El Rodaje de Bandera de los Capitanes de la Santa Cruz se efectuaba, además de en los sitios actuales, en el Castillo de San Benito (Lugar Alto), el campo de fútbol “El Palmeral” (piscina municipal), y en alguna que otra era (lugar donde se trillan las mieses). El Rodaje de Banderas también se hacía el día 3 por las tarde.

Nuestro querido día 3 de Mayo sigue vivo, pero…
     
Desde principio de siglo hasta 1948 la Romería regresaba de Mahoya a las diez de la mañana. Antes de las doce entraba en la Iglesia Parroquial. A comienzo de los cincuenta, la hora de regreso era a las 12 horas. Desde 1977 el regreso fue a la una. En 1986 se optó por no poner en el programa de fiestas la hora de regreso, visto la imposibilidad de predecirlo. El pasado año el regreso de Mahoya fue a las tres de la tarde y la llegada a la parroquia a las ocho menos cuarto.

Volver a recuperar algunos de estos actos desaparecidos podría ser  interesante, pero lo que sí es vital es recuperar nuestra Romería. No podemos consentir que se deteriore más

En la última fiesta de mayo del milenio, estaban con nosotros el alma de la kábila Jaira, Manolo Están, y el motor de la mesnada Almogávares, Benito Ruiz. Un Moro y un Cristiano a los que este siglo también se ha llevado. Pero en nuestro recuerdo permaneceréis toda la vida.

                                                                                   Gabriel Esteve Ruiz 

    Publicado en el Programa de Fiesta del 2000